
Es la segunda vez en la temporada que viajamos al Rico Pérez y ya van unas cuantas en los últimos años. Empieza a ser campo desagradable porque allí nunca se gana. Las cabinas, como se puede apreciar, son bastante peores que las del Helmántico. Colocar los equipos no es nada fácil porque su longitud es bastante mayor que la de la mesa. Eso si, hay televisión. Si funcionara, sería genial. El domingo no fue así. El día del Hércules se veía todo. Se nota cuando juega el Hércules o el Alicante. Muchos menos aficionados y empleados y mucho menos de todo. Gorka Esparza nos acompañó en la retransmisión y se portó muy bien. Estaba nervioso, difícil de creer y sobre todo de notarlo, pero le apetecía mucho y era la primera vez como nos decía. Le gusta el fútbol y la Unión. Con esos requisitos es suficiente. La próxima visita es a Córdoba. Intentaremos tener foto. Para ello contamos con la inestimable ayuda de Loren Ruano que siempre nos pasa alguna instantánea. Unionista eterno y el mayor conocedor de toda la historia del club que hay en la ciudad.
Los lectores del blog comprobarán que Córdoba es un viaje incómodo para los periodistas de radio. Solo hay un gran banco corrido en el que todos estamos juntos y donde se oyen las voces de multitud de periodistas. Un gran gallinero pelín insoportable. Eso si, la ciudad es preciosa. Allí habrá más unionistas y ojalá todavía un ascenso en juego.

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